Procedente de ovejas criadas de forma ética en granjas ecológicas certificadas, esta lana se esquila con la máxima consideración por el bienestar de las ovejas.
La lana ecológica encarna una relación armoniosa entre la naturaleza y las ovejas, cultivada con cuidado y respeto tanto por el bienestar animal como por la sostenibilidad medioambiental.